12 autores para 2017

A finales de diciembre, muchos blogs literarios tienen por costumbre mirar atrás, valorar lo leído en los 12 últimos meses y hacer una lista con lo mejor o lo peor del año. Es algo realmente enriquecedor y ayuda muchísimo para que otros lectores se puedan fijar en obras que quizás hayan pasado por alto.

Pero yo hoy voy a hacer lo contrario. Voy a mirar hacia delante. Y para eso, he realizado una lista con doce autores/as de los que no he leído nada con el propósito de remediar tal situación el año próximo; muy próximo.

Así, a continuación tendréis una lista de doce escritores/as y una explicación breve de lo que me ha llamado la atención de ellos lo suficiente cómo para querer sacarlos de esa eterna lista de “escritores pendientes” que tenemos todos.

Ojalá  disfrutéis este pequeña travesía literaria que propongo y encontréis algún autor de vuestro interés. Con todos ustedes: 12 autores para 2017.

Allá vamos.

1.- László Krasznahorkai

Este escritor húngaro de apellido interminable es considerado un autor de culto visionario. De estilo intenso y complejo, su trabajo brilla por ser trágico y cómico, bello y terrorífico, extraño y seductor. Esas hermosas contradicciones han llamado mi atención con una fuerza inaudita y creo que ya es hora de hacer frente al deseo despertado.

Me interesa especialmente su Melancolía de la Resistencia, tildada por muchos como una obra maestra del humor negro.

Afortunadamente, la editorial Acantilado se ha dedicado a rescatar su obra para los hispanohablantes y muchos de sus trabajos ya los tenemos disponibles; hecho que aprovecharé el año venidero sin duda alguna.

2.- W. G. Sebald

Sebald es uno de los autores más admirados del siglo XX y el escritor que más cuidadosamente ha retratado los horrores de esa época.

Pero Sebald no me ha llamado la atención por sus temas, sino por cómo debe tratarlos. Habla de la memoria, el exilio y la persecución política, mezclando autobiografía con ficción (e incluso viajes) en un tono delicado, sugestivo, íntimo y sutil; pero no por ello inofensivo.

Y las letras siempre están acompañadas de fotografías en blanco y negro; para que no olvidemos las sombras del dolor histórico europeo.

Ha llegado el momento de recoger Los anillos de Saturno de la estantería, enfrentarme al pasado y sentir una voz tan interesante como la de este admirado genio.

3.- Marina Tsvietáieva

Voy a ser claro: lo que realmente me interesa de esta poetisa rusa es su vida. Leeré también su ficción, porque la ficción esconde verdades, y mucha verdad oficial es realmente ficción, pero a estas alturas ya tengo decidido empezar por sus diarios. Quiero leer y adentrarme en el infierno que vivió.

Copio de Wikipedia:

[…]Nació el 26 de septiembre de 1892, hija del fundador del Museo Pushkin de Moscú Iván Tsvetáiev. Tuvo que exiliarse en Praga (1922) y luego en Francia (1925) después de la revolución rusa con su marido, un oficial en activo.

Vivió 14 años en Francia, desdichada y deprimida. Tenía dos hijas, Irina y Ariadna, y un hijo, Gueorgui. En 1939, volvió a la Unión Soviética con su hijo Gueorgui (Mur) para reunirse con su marido Serguéi Efrón, quien había regresado a Rusia con su hija Ariadna en 1937. Pero en el mismo año su marido Serguéi Efrón y Ariadna fueron arrestados, y Serguéi Efrón fue fusilado en 1941. Ariadna, tras permanecer ocho años en el Gulag, fue arrestada de nuevo en 1949 y enviada al destierro en el raión de Turujansk. Fue rehabilitada en 1955.

Marina Tsvetáyeva, padeciendo la reprobación oficial, no pudo encontrar vivienda ni trabajo. Era tan pobre que su hija Irina hubo de ir al orfanato donde, dadas las malas condiciones, murió de hambre. Cuando comenzó la Gran Guerra Patria, Marina fue evacuada a Yelábuga, Tartaristán, donde se suicidó en 1941[…].

Los diarios de esta mujer tienen que estar a la altura de las mejores tragedias escritas. También leería sus Confesiones pero las ediciones disponibles que conozco son caras y tal desembolso dependerá de mis impresiones en cuanto a sus diarios.

4.- Thomas Browne

Reconozco que las dos principales razones por las que quiero leer a este autor no son motivos de peso para todos: a) Javier Marías lo admira b) las citas que he leído me parecen acojonantes.

Hace algunos días colgué en instagram una foto de un libro que reúne dos de sus obras más aplaudidas con introducción, traducción y epílogo del citado Marías.

• Religio Medici (La religión de un médico, 1642)
• Hydriotaphia, Urn Burial (El enterramiento en urnas, 1658)

La primera es un autorretrato psicológico donde narra su relación entre el Browne médico y el Browne cristiano. El estudio de la ciencia y la fe en un mismo hombre.

En la segunda, Browne medita sobre la línea siempre difusa de la perdurabilidad y el olvido, lo eterno y lo efímero, la muerte y el tiempo.

Cómo no adentrarse en estas páginas.

5.- Kjell Askildsen

Los que lleváis tiempo leyéndome sabéis que adoro el relato; es un género que consumo mucho y es por ello que resulta incomprensible tener a uno de los más grandes aún por leer.

Askildsen, como buen relatista, es sobrio y conciso, con una fría ironía (no olvidemos que es noruego) como arma principal para reflejar nuestra infelicidad y soledad como rutina existencial. Un hiriente retratista de nuestros fantasmas interiores.

Además, como detalle a tener en cuenta, su obra  fue prohibida por «inmoral» en la biblioteca pública de su ciudad natal, debido a su alto contenido sexual. Lo que siempre es un plus, ¿no?

6.- Stella Gibbons

Llamémoslo de estilo british, con prosa descriptiva y un humor mordaz. ¿Qué oscura razón me ha tenido tanto tiempo lejos de su obra?

Stella Gibbons es mundialmente conocida por su novela La hija de Robert Poste; obra que le dio la fama, pero también ensombreció todos sus demás trabajos.

Obviamente, me iniciaré con esta autora leyendo su trabajo más aplaudido, definido como una de las mejores novelas cómicas del siglo XX, histriónica, hiperbólica,  satírica y muchos más adjetivos terminados en –ica.

7.- Thomas Bernhard

Y de Inglaterra volamos hasta Austria para leer a otro gran escritor al que llevo ignorando demasiado tiempo.

Thomas Bernhard fue un novelista, dramaturgo y poeta ; pero también un meticuloso explorador de los sentimientos humanos y el absurdo de la vida. Otro de esos escritores pesimistas que han logrado mi atención.

Pero a pesar de ello, el austriaco debe de ser también un escritor con gran sentido del humor, sobre todo en sus teatros; donde libera ese humor satírico y negro que tanto suelo disfrutar.

Su prosa, para muchos más cercana a la música que a la literatura, es conocida por la ausencia de párrafos y capítulos, las repeticiones y las frases largas de ritmo endiablado.

Algún día de 2017 cogeré El sobrino de Wittgenstein, novela que me interesa porque la figura del filósofo es bien conocida para mí por estudios y trabajo. Y cuando me conquiste, caerá todo lo demás.

8.- Delphine De Vigan

La autoficción está de moda, o al menos las novelas con tintes autobiográficos; es un hecho innegable. Los lectores se sienten fascinados por descubrir qué es real y qué no. Pero no es un género en el que me haya adentrado mucho, si os soy sincero. Y aquí se me abría un abanico de posibilidades de difícil elección. ¿Por donde empiezo?

Por mi cabeza pasaron muchos autores: Karl Ove Knausgard, Annie Ernaux, Edward St. Aubyn, El Reino de Emmanuel Carrere….

Al final me decanté por Delphine De Vigan. La razón es sencilla, su último trabajo me interesa mucho. En ella se nos narra la relación de una protagonista que comparte su nombre y profesión con una de sus admiradoras.

Todo esto mientras De Vigan reflexiona sobre el abuso de poder, nuestros fantasmas o las personas con la capacidad de adueñarse de vidas ajenas. Además de resultar ser una clase magistral sobre el proceso de escritura.

Poco más puedo pedir.

9.- Torborg Nedreeas

No os voy a engañar, Nada crece a la luz de la luna me ha llevado a esta escritora. Es una pequeña trampa, en 2017 quiero leer la obra publicada por Errata Naturae y por eso he tenido que añadir a su autora en esta lista. La elección pues, es la obra en sí, no la propia autora. Pero cómo negarme a una novela que me ha hechizado con lo poco que sé de ella.

En una estación de tren, un hombre observa que una joven camina hacia ningún lugar, deambulando sola en una fría noche. Esa mujer sigue al hombre hasta su casa y le da dos opciones a elegir: a) su cuerpo b) su historia. El hombre se queda con la segunda opción.

Este sugerente y misterioso inicio nos sumergirá en los desgarradores recuerdos de esta mujer, sin olvidar la fuerza de la naturaleza noruega.

Nedreeas, tú y yo tenemos una conversación pendiente.

10.- Rosa Chacel

Esta escritora de la generación del 27 fue añadida por recomendación de mi amiga Anna Camús, ex-bloguera, ex-tuitera… una figura que el mundo virtual literario en general, y yo en particular echará de menos.

Y en su honor, me iniciaré con sus poemas, ya que es un género que ella adora y al que yo le doy menos cariño del que merece. Así, evito seguir ignorando la poesía entre estos propósitos que he redactado.

Chacel ha dado siempre prioridad a su obra en prosa, pues ha considerado la poesía como un ejercicio personal, casi privado, que sólo en ocasiones merece hacerse público. Aún así, la poesía de Chacel se describe de una belleza elegante, natural y transparente.

11.- Octave Mirbeau

Un buen día compré un disco titulado Fear Fun, de mi queridísimo Father John Misty. Abrí el álbum y me encontré con una cita que me fascinó:

You’re obliged to pretend respect for people and institutions you think absurd. You live attached in a cowardly fashion to moral and social conventions you despise, condemn and know lack all foundation. It is that permanent contradiction between your ideas and desires and all the dead formalities and vain pretenses of your civilization which makes you sad, troubled and unbalanced. In that intolerable conflict you lose all joy of life and all feeling of personality, because at every moment they suppress and restrain and check the free play of your powers. That’s the poisoned and mortal wound of the civilized world.

BOOM. Acto seguido me fijé en el autor de dicha cita: Octave Mirbeau. Y también me fijé que la cita pertenecía a una obra llamada El jardín de los suplicios (1899). Y una última buena noticia: Impedimenta la rescató allá por 2010.

Mirbeau dedicó estas páginas de asesinato y sangre escritas en pleno caso Dreyfus a los Sacerdotes, a los Soldados, a los Jueces, a los Hombres que educan, dirigen y gobiernan. Al francés, por lo visto, le gustaba hacer amigos.

12.- Barbara Pym

A Mujeres Excelentes de Pym le seguía la pista desde hace tiempo. Las reseñas positivas que leía una tras otra también me animaban a dar el salto.

Blogueros/as en los que confío por afinidad de gustos caían ante la ya archiconocida #FiebrePym y creo que 2017 puede ser un buen año para contagiarme yo también.

No sé si lo de “la Jane Austen contemporánea” son palabras mayores, pero incitan a darle una oportunidad a su universo literario. Como ya he comentado previamente, siento debilidad por la comedia de costumbres británica; pero por lo que me he informado, su tono aparentemente inofensivo esconde mucha ironía y una narración lúcida y de carácter trágico.

Vendido.

Y esto es todo amigos/as. No queda más que desearos un feliz fin de año, un próspero año nuevo, libros, libros y más libros.

Sois libres de añadir vuestros autores pendientes en los comentarios o de compartir vuestra opinión sobre alguno de los nombrados en mi lista.

Ha sido todo un placer leeros por estos lares virtuales; espero seguir disfrutando de vosotros/as en 2017; y compartir lecturas, opiniones, escuchar, comentar y aprender.

Y como viene siendo costumbre…

Leed mucho y sed felices.